No sólo la fuerza, la resistencia, la velocidad... triunfan en los Juegos Olímpicos, también el amor. Cupido ha hecho puntería en los corazones principescos y ha conseguido sus mejores marcas en el marco olímpico: unas parejas reales se enamoraron en unas Olimpiadas, como Federico y Mary de Dinamarca, que se conocieron casualmente en Sídney 2000 y revivieron su historia de amor tan sólo tres meses después de su Boda Real, al igual que los Príncipes de Asturias, en Atenas 2004; otras hicieron pública su relación en una cita olímpica, como Alberto y Charlene de Mónaco, que se presentaron en los Juegos Olímpicos de Invierno de Turín 2006 como dos espectadores enamorados, y otras viven en las gradas olímpicas la cuenta atrás para su unión, como el príncipe Guillermo y Stéphanie de Lannoy, los novios de Luxemburgo, que disfrutan de sus últimos Juegos de solteros.
A ochenta días de que se celebre su boda, el príncipe Guillermo se dejó ver estos días en compañía de su novia, Stéphanie de Lannoy, en el Centro Acuático de Londres para presenciar las pruebas de natación de los Juegos Olímpicos. El Heredero y su prometida no escatimaron en muestras de afecto en las gradas durante uno de las escasos eventos en los que se les ha podido ver juntos desde que se anunciara el compromiso oficial el pasado abril. Los novios de Luxemburgo, exultantes de alegría durante todo la competición, se dejaron llevar por el entusiasmo deportivo enarbolando él una bufanda con los colores de la bandera luxemburguesa y ella una bandera con el escudo del león de gules del Gran Ducado.
Los jóvenes prometidos estuvieron acompañados de toda la Familia Gran Ducal de Luxemburgo. El gran duque Enrique acudió al acto con una cámara de fotos y no dudo en tomar varias instantáneas de sus hijos. También coincidió con algunas personalidades internacionales, como el candidato a la Presidencia de los Estados Unidos por el Partido Republicano, Mitt Romney, con el que departió distendidamente durante unos minutos. Unas localidades más allá se encontraban el príncipe Luis y su esposa, la princesa Tessy. Ambos nos regalaron igualmente románticas imágenes al posar muy acaramelados para la cámara de la princesa Alejandra. También asistió a la competición el príncipe Félix, si bien, en este caso, no acompañado. Aunque Cupido siempre se pasa por los Juegos y hace blanco...
